Letras
At 1:19 p.m. on
17 enero 2006
la levanté con mis brazos, era frágil, seria y sonriente. me la amarraba en mi espalda, medio pujaba y sonreía, bucles. me ponía mis patines, mis muñequeras, y salíamos por la puerta de madera. dándonos la espalda reconocíamos cosas distintas. con sus bellos ojos veía como las cosas se hacían mas chicas cada ves, y cada ves aparecían monstruos verdes que los movía el viento. son monstruos buenos preciosa, le decía, es mas ni monstruos son, se llaman árboles y son los que nos dan oxigeno, para respirar rico. mis ojos se llenaban de agüita salada enseñando algo tan simple. subimos montañas, cruzamos ciudades, patinamos en los barcos, cruzamos fronteras, patinábamos por días, en los parques, en las calles, por el desierto. me pasaba el espejo por la espalda y le veía el rostro, justo ese rostro ya soñado. sonreía y vivía. asombrada de descubrir cosas con su hombre, el único. mis piernas cansaban. mis ojos ardían. mi esperanza alimentada.
-tengo hambre, me dijo a su manera.
-lo se princesa, lo se.
-¿y porque no comemos?
-porque tu comida la tiene tu mamá, la estamos buscando.
Ayer me soñé que tenía una hija.
fucser